En la apertura, Gazarian se refirió a los flujos migratorios y la economía mundial como marco para explicar los procesos de expatriación y repatriación en los ámbitos empresariales, las cuestiones migratorias, fiscales, documentarias, de relocalización y mudanza de personas y grupos familiares. Asimismo, comentó aspectos sobre argentinos en el exterior por motivos atinentes al funcionamiento de empresas locales con presencia internacional.
Por su parte, Arias Duval, tras trazar un panorama histórico de las políticas migratorias argentinas, se explayó sobre el quiebre que implicó la Ley de Migraciones 25.871 “que estableció un hito único en el mundo al dar trato migratorio preferencial a los connacionales de Mercosur y estados asociados, apuntando al libre tránsito regional de personas”. En el plano ideológico, sostuvo “que las decisiones políticas son concebidas como procesos de integración y no como un problema de seguridad nacional”, criterio que resultaba anacrónico.
Destacó además el avance que significaba la reciente aprobación de la reglamentación de la citada ley; los programas de capacitación de los recursos humanos para adecuarse a la realidad y brindar un servicio eficiente en las tramitaciones y la masiva regularización de inmigrantes “porque el Estado no sabía cuántos eran, ni dónde vivían, ni qué hacían”. En este tránsito, comentó el sistema de ventanilla única para la obtención de la radicación y el nuevo DNI (“antes el trámite era kafkiano”); la incorporación de tecnología informática en la admisión de extranjeros (“evitando la discrecionalidad del empleado de turno”) y el control de tránsitos en aeropuertos, puertos y pasos de frontera a nivel nacional.
Señaló además que se trataba de “un nuevo paradigma, un cambio de mentalidad, un proceso que conlleva impedir la corrupción, la trata y el tráfico. Ya no corremos detrás de la coyuntura”.
En tanto que Manzanares informó ampliamente sobre las diferentes categorías de radicación (permanente, temporaria y transitoria); los criterios, razones de otorgamiento y plazos de cada una; y, sobre todo, las particularidades de las residencias por motivos laborales, comerciales, profesionales y empresariales de extranjeros de países con los cuales hay o no acuerdos de visas.
Finalmente hubo una ronda de preguntas que permitieron abordar temáticas específicas de las tramitaciones, instancias y documentaciones. En el cierre, Gazarian, además de agradecer y valorar la participación de los funcionarios de la DNM, ponderó el cambio altamente positivo que se ha operado en el organismo, en su funcionamiento y modernización, algo que había experimentado personalmente por ser venezolana.